Cuantas veces nos hemos encontrado en medio de una discusión con nuestra pareja en la que el tema principal es... "Es que tu no me quieres como yo a ti"
Pues bien esto tiene un largo origen ya que desde que estamos pequeños la sociedad nos va metiendo en la cabeza una idea de lo que se supone deberia de ser el amor perfecto, las peliculas de disney con final feliz ,princesa conoce a principe y son felices para siempre, el principe nunca es infiel y la princesa es la mujer perfecta, las telenovelas con final feliz, Maria mercedes ,Marimar, Maria la del barrio en todaas la chica pobre que nadie quiere termina casada con el chico rico y tienen un hermoso bebe y viven felices para siempre.
Pues bien esto tiene un largo origen ya que desde que estamos pequeños la sociedad nos va metiendo en la cabeza una idea de lo que se supone deberia de ser el amor perfecto, las peliculas de disney con final feliz ,princesa conoce a principe y son felices para siempre, el principe nunca es infiel y la princesa es la mujer perfecta, las telenovelas con final feliz, Maria mercedes ,Marimar, Maria la del barrio en todaas la chica pobre que nadie quiere termina casada con el chico rico y tienen un hermoso bebe y viven felices para siempre.
Nos meten esas ideas falsas de lo que es el amor y lo hacen ver como algo muy facil como un esquema a seguir para poder ser considerado amor.
Entonces que pasa.... Crecemos y si la pareja que nos toca no es como el principe disney o el galan de telenovela en nuestro creado concepto del amor significa que no nos quiere y de hay vienen las peleas y discusiones, y cuando nos defraudamos de la otra persona en realidad nos estamos defraudando de nosotros mismos ya que nosotros mismos somos los que nos creamos esa falsa idea del amor.
Cada persona tiene su propia historia de vida y su propio concepto del amor, cada persona es diferente y quiere o ama a su manera, para algunos amar y querer es lo mismo, para otros no lo es , pero a final de cuentas el sentimiento ahi esta, existe y si estan y siguen juntos por algo sera.
Aparte una cosa es enamorarse y otra es amar, nos enamoramos de alguien y lo idealizamos, no vemos sus defectos sino que vemos lo que nosotros queremos ver, es decir lo mas parecido a nosotros mismos, a lo que algunos llaman nuestra media naranja por ser exactos, por eso dice Jorge Bucay que enamorarse es amar las coincidencias, porque en el enamoramiento solo nos quedamos con lo que en la otra persona coincide con nosotros, sin embargo cuando acaba el proceso del enamoramiento, éste da paso al amor y amar es enamorarse de las diferencias, es decir una vez que empezamos a conocer a nuestra pareja y vemos la cantidad de diferencias que hay entre los dos mucha gente se decepciona y rompe la relacción pero lo que hay que hacer es sabiendo esas diferencias, aceptarlas y enamorarse de ellas, aceptando a nuestra pareja tal y como es.
Estar enamorados nos conecta con la alegría que sentimos al saber que el otro existe.
Pasamos algunos meses, la realidad nos invade y todo termina, o empieza la construcción de un camino.
Cuando uno se enamora, en realidad no ve al otro en su totalidad, sino que el otro funciona como una pantalla donde el enamorado proyecta sus aspectos idealizados.
Los sentimientos, a diferencia de las pasiones, son más duraderos y están anclados en la percepción de la realidad externa. La construcción del amor empieza cuando puedo ver al que tengo delante, cuando descubro al otro. Es allí cuando el amor reemplaza al enamoramiento.
¿Qué pasa cuando, después de un tiempo, el otro se empieza a mostrar como es y eso no coincide con mi ideal?
Ahí comienzan los conflictos. Él no es como yo había creído. La disyuntiva que aquí se plantea es ver si puedo amar a este que veo o si me quedo pegada a mi "hombre ideal".
Es como despertar de
un sueño. Aparecerá poco a poco una persona asombrosamente diferente de aquella con la que creíamos habernos unido. El otro no ha cambiado, sólo han cambiado los ojos con los que miran.
Uno descubre las diferencias y éstas desembocan en confrontación.
Tan sólo ahora uno puede descubrirse acompañado. Hay que buscar las diferencias e intentar unirse a través de ellas. No como antes, que nos unían sólo las semejanzas.
Duele dejar de lado las ilusiones y aceptar la realidad pero es solo en la realidad en donde se pueden crear los simientos del amor verdadero.
Dejemos a un lado el egoismo y demonos y aceptemos la forma de amar de nuestra pareja ya que para el esa forma es la única que conoce y pone lo mejor de sí mismo para hacernos sentir amados, si el amor que esa persona no nos basta es por que el egoismo y los falsos conceptos que traemos nos ciegan,debemos simplemente amarnos con los ojos abiertos ,con la mente abierta a nuevas formas de amar.
Asi es que como conclusión todo es cuestión de ser tolerantes con uno mismo y con la pareja, dejar el egoismo y abrir las puertas a la comprensión.
